En los últimos meses, Panamá ha incrementado significativamente los vuelos de deportación de ciudadanos colombianos que han cruzado la peligrosa selva del Darién con el objetivo de llegar a otros países de América del Norte. Esta medida, aunque ha sido justificada por las autoridades panameñas en términos de seguridad y control migratorio, ha generado un amplio debate sobre sus implicaciones humanitarias y sociales.
¿Por qué están aumentando las deportaciones?
Diversos factores han confluido para explicar el aumento de las deportaciones de colombianos desde Panamá:
- Aumento de flujos migratorios: La crisis humanitaria en Venezuela y otros países de la región ha impulsado un incremento en los flujos migratorios hacia el norte, lo que ha generado una mayor presión en los países de tránsito como Panamá.
- Condiciones peligrosas en el Darién: La selva del Darién es considerada una de las rutas migratorias más peligrosas del mundo, exponiendo a los migrantes a riesgos como la deshidratación, el hambre, la violencia y el crimen organizado.
- Acuerdos internacionales: Panamá ha suscrito acuerdos bilaterales con Colombia y otros países para facilitar la repatriación de migrantes irregulares.
- Presiones políticas: La creciente presión internacional sobre los países de la región para que controlen los flujos migratorios ha llevado a Panamá a intensificar sus medidas de control fronterizo.
Implicaciones de las deportaciones
Las deportaciones de colombianos desde Panamá tienen diversas implicaciones:
- Situación humanitaria: Muchos de los deportados enfrentan dificultades para reinsertarse en la sociedad colombiana, careciendo de recursos económicos y oportunidades laborales.
- Seguridad: La presencia de grupos armados ilegales en algunas regiones de Colombia puede exponer a los deportados a nuevos riesgos.
- Relaciones bilaterales: Las deportaciones pueden generar tensiones en las relaciones bilaterales entre Colombia y Panamá, especialmente si se perciben como una falta de solidaridad.
- Derechos humanos: Organizaciones de derechos humanos han expresado preocupación por las condiciones en las que se llevan a cabo las deportaciones y por la falta de garantías para los migrantes retornados.
Migracioncolombia en su sitio web informo que estos vuelos vienen siendo atendidos desde el 2016 y traen únicamente ciudadanos colombianos, y desde el año 2023 la cantidad de nacionales recibidos ha aumentado, lo cual se puede evidenciar en las siguientes cifras:
- En 2022 se registraron 121 connacionales.
- En 2023 se recibieron 378 connacionales.
- En lo que va corrido del año 2024 se han recibido 365 connacionales.
Este procedimiento hace parte de los acuerdos bilaterales entre Colombia y Panamá, y se realiza en estricto cumplimiento de las normativas nacionales e internacionales en materia migratoria. Es importante destacar que este tipo de operaciones son rutinarias y forman parte del trabajo constante de Migración Colombia para garantizar el orden y la legalidad en las fronteras del país.
Las personas deportadas para el gobierno de Panamá son aquellas que ingresaron de manera irregular a su territorio, y han sido entregadas a las autoridades colombianas para que se les brinde la atención correspondiente. Como parte de su labor habitual, los funcionarios de Migración Colombia hacen previamente la verificación de la plena identidad de los pasajeros, y que no tengan pendientes con la ley, de ser así, son puestos a disposición de la Policía Nacional. Finalmente se realiza el proceso de ingreso al país.
Migración Colombia reitera su compromiso con el respeto a los derechos humanos y el cumplimiento de los procedimientos legales en todos los procesos migratorios. Seguimos trabajando de manera coordinada con los países vecinos para gestionar de manera eficaz y ordenada la migración en la región.
¿Qué se puede hacer?
Para abordar esta problemática de manera integral, es necesario:
- Fortalecer los canales de migración regular: Facilitar la migración regular a través de visas humanitarias y programas de reunificación familiar.
- Promover el desarrollo en los países de origen: Invertir en programas de desarrollo económico y social en Colombia y otros países de la región para reducir las causas profundas de la migración.
- Cooperación internacional: Fortalecer la cooperación entre los países de origen, tránsito y destino para abordar de manera conjunta la crisis migratoria.
- Respeto a los derechos humanos: Garantizar el respeto a los derechos humanos de los migrantes en todas las etapas del proceso migratorio.
En conclusión, las deportaciones de colombianos desde Panamá son un reflejo de una crisis migratoria compleja que requiere soluciones a largo plazo. Es fundamental adoptar un enfoque integral que aborde tanto las causas como las consecuencias de la migración, y que ponga en el centro los derechos humanos de las personas en movilidad.
