A través del programa ‘Movilidad Segura’, las personas refugiadas y migrantes elegibles serán consideradas...
El gobierno de Estados Unidos está obligando a los solicitantes de asilo en la frontera entre Estados Unidos y México a usar CBP One, una aplicación con fallas y poco confiable creada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, para programar una cita y solicitar protección.
Pero muchos no pueden obtener una cita. Necesitan un teléfono inteligente actualizado y acceso a Internet. Deben poder navegar por la aplicación, incluso si está en un idioma que no entienden. Y necesitan pura suerte, ya que solo hay 1.450 citas disponibles por día a través de un sistema de lotería.
Si una persona no tiene una cita, el gobierno de los Estados Unidos la rechaza y le niega el acceso al proceso de asilo.
Esta barrera tecnológica al asilo es ilegal e inconstitucional. Viola las propias promesas del gobierno de mantener abiertos los puertos de entrada.
El Consejo Estadounidense de Inmigración, el Centro de Estudios de Género y Refugiados, Mayer Brown LLP, el Centro de Derechos Constitucionales y nuestros socios presentaron una demanda que desafía la política y la práctica del gobierno federal de devolver a los solicitantes de asilo sin una cita de CBP One en los puertos de entrada.
La demanda busca poner fin a la última política de rechazo de CBP y garantizar que el gobierno siga su propia guía y las leyes destinadas a proteger los derechos y la seguridad de los solicitantes de asilo. No podemos permitir que las personas regresen al peligro simplemente porque no pueden programar una cita con una aplicación defectuosa. Ademas busca garantizar que el gobierno cumpla con las leyes de Estados Unidos destinadas a proteger los derechos y la seguridad de los solicitantes de asilo.
Las personas que llegan a los puntos de entrada tienen derecho a solicitar asilo sin topes artificiales ni barreras tecnológicas. Durante décadas, el Congreso ha ordenado un trato equitativo para todos los que buscan protección contra la persecución, independientemente de cómo lleguen a los Estados Unidos. El propio gobierno federal ha publicado una guía que requiere que los oficiales de CBP inspeccionen y procesen a cualquier persona que venga a los puntos de entrada en busca de asilo, ya sea que tenga o no una cita con CBP One.
Restringir el acceso al asilo solo a las personas que pueden usar una aplicación de teléfono inteligente impone barreras injustas y, en ocasiones, insuperables para los solicitantes de asilo. La Política de devolución de CBP One, según la cual los oficiales de CBP rechazan a la mayoría de los solicitantes de asilo que no pueden asegurar una cita realizada a través de la aplicación CBP One, crea problemas de idioma, alfabetización y acceso para discapacitados.
Los demandantes en el caso son las organizaciones de derechos de los inmigrantes Al Otro Lado y Haitian Bridge Alliance, y 10 personas fueron rechazadas en la frontera sur por CBP y se les negó su derecho fundamental a buscar asilo en los Estados Unidos.
Los demandantes están representados por el Consejo Estadounidense de Inmigración, el Centro de Estudios de Género y Refugiados (CGRS) y el Centro de Derechos Constitucionales, junto con Mayer Brown LLP y otros.
Lo mantendremos informado a medida que avance la demanda. Mientras tanto, considere hacer una donación para apoyar este litigio.
