En el estado de California, en Estados Unidos, un inmigrante de Camerún de 37 años murió el martes tras enfermarse en una prisión del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas. En un comunicado, dicha agencia sostuvo que el hombre, Nebane Abienwi, quedó parcialmente paralizado después de sufrir una hemorragia cerebral en medio de la noche en el centro de detención de Otay Mesa.
La agencia afirma que Abienwi fue trasladado de urgencia a un hospital de San Diego, pero murió luego de recibir tratamiento. La cárcel para inmigrantes es operada por CoreCivic, una empresa de gestión penitenciaria con fines de lucro. En un comunicado, Lizbeth Abeln, de la organización Inland Coalition for Immigrant Justice, dijo: “La pérdida continua de vidas en la detención de inmigrantes no solo es desgarradora, sino que es indignante.
En este momento hay un proyecto de ley en el escritorio del gobernador Gavin Newsom que espera ser firmado, que prohibiría los centro detención privados, como Otay, en California. Las personas detenidas no pueden darse el lujo de estar tras las rejas un segundo más, Newsom necesita firmar [el proyecto de ley] ahora”.