Aunque no se crea hubo una época en la que entre el norte y el sur no existen fronteras y la gente circulaba libremente, en 1818 California era parte de México de hecho varios estados del suroeste del país eran territorio mexicano, aquí se habla español y ya pesar de que una guerra de Marco nuevas fronteras los nombres de las calles y de ciudad es hoy en día aún conservan esa herencia cultural.
La huella latina en Estados Unidos es innegable pero pareciera que todavía hay quienes no reconocen que la grandeza de esta nación fue fundada sobre los hombros de los emigrantes.
Los Hispanos en los Estados Unidos no son sólo una minoría sino la fuerza que está cambiando el rostro de esta nación, aproximadamente es el 18% de la población, vivimos principalmente California Texas Florida Nueva York, New Jersey sin embargo otros territorios ya reflejan un aumento notable.
Oportunidades de empleo en la Industrias como la agrícola, la construcción provocaron esta expansión demográfica, en definitiva los inmigrantes han ido llegando al igual que las generaciones anteriores en busca de una vida mejor.
Para entender el crecimiento de la población hispana en Estados Unidos sólo hay que ver los mapas que detallan el país de origen de los inmigrantes, a partir de 1850 la mayoría de los emigrantes en ese entonces provenían de Irlanda y Alemania. A principios del siglo 20 a la población alemana se reunió la de Gran Bretaña y el número de mexicanos también creció la Florida, los cubanos marcaron su presencia. Para 1950 la diversidad era más visible, canadienses, italianos, noruegos y suecos tenían comunidades bien establecidas. En el año 2000 ocurrió en la mayor transformación, los mexicanos se extendieron por casi todo el país.
Desde la fundación de esta nación los emigrantes han sido las personas más importantes en construir las instituciones, el gobierno externo de Educación y las comunidades que tenemos tan ricas por su diversidad aunque siempre han tenido que enfrentar el rechazo, la discriminación se siente a todo nivel.
Aunque en muchos casos los hispanos son tratados como extranjeros, lo cierto es que las tres cuartas partes son ciudadanos estadounidenses y representan 15% de toda la economía de los Estados Unidos.