En el mar Mediterráneo, el gobierno de Malta permitió que los cerca de 50 solicitantes de asilo que han estado varados en el mar durante semanas desembarquen en dos barcos de rescate. La decisión puso fin a un punto muerto de 19 días durante los cuales otros miembros de la Unión Europea negaron un puerto de entrada al continente a los migrantes, en una medida que fue calificada como “vergonzosa” por grupos de derechos humanos.
A bordo del buque Sea-Watch 3, dirigido por un grupo de ayuda humanitaria alemán, causó regocijo la difusión de la noticia emitida el miércoles de que se acordó proceder el procesamiento de las solicitudes de asilo.
Kim Heaton-Heather exclamó: “Dos horas. Dos horas. Dos horas. Tenemos un puerto seguro. Vamos a entrar. Se acabó”.
Un número creciente de buscadores de asilo está falleciendo en el mar, tras la decisión tomada el año pasado por el Gobierno de derecha de Italia de negar la entrada de los barcos de rescate de migrantes a los puertos de ese país.
Según la Armada maltesa, se ha decidido aceptarles tras ver las malas condiciones y el mareo de la mayoría de migrantes a bordo. Hay 3 ciudades en Alemania que ya han aceptado recibir a las personas rescatadas y estas son Berlín, Hamburgo y Bremen, por lo que solo estamos esperando la autorización del Ministerio del Interior para permitir una transferencia que debe acordarse con el país que permitiría el desemarco en su territorio.