La Unión Europea ha logrado un acuerdo de mínimos para gestionar la inmigración tras una sesión maratónica de 14 horas de reunión, 9 horas de negociación y una larga lista de borradores. Pero ¿será capaz de resolver esta grave crisis con las decisiones tomadas?
La UE promoverá la creación de centros cerrados y controlados en su territorio para el desembarque de inmigrantes. Allí se separarán los refugiados con derecho a permanecer en los países comunitarios de los inmigrantes económicos que serán deportados. Sin embargo, varias fuerzas políticas europeas ya apuntan a que estas instalaciones son un eufimismo de los Centros de Internamiento de Extranjeros que, según ellos, son verdaderas cárceles.
Estos centros se ubicarán en la UE a base de la buena voluntad. Y es que algunos países ya han negado la posibilidad de hacerlo. Según fuentes de delegación española, España no es candidata a crear estos nuevos centros. A pesar de acoger los inmigrantes de Aquarius, el país ibérico afirma que solo se trataba de una medida excepcional.
Los refugiados serán ubicados en el territorio de las naciones comunitarias que voluntariamente quieran acogerlos. Sin embargo, no está claro qué países los recibirán, especialmente teniendo en cuenta que en varios países, como Italia, la política en esta materia se ha hecho más rígida. No obstante, reglamento de Dublín continúa vigente y supone que el migrante se quedará en el territorio en el que haya solicitado por primera vez el asilo.
En el video el experto en geopolítica Fernando Moragón nos analiza este asunto.